Hospital de San Lázaro

Junto al cementerio de San Fernando se erige el hospital más antiguo de Sevilla, el de San Lázaro. Se construyó por orden de Alfonso X tras la conquista de la ciudad, ante la necesidad inminente de separar a los enfermos infecciosos del resto de la población. En este sanatorio vienen sucediendo desde hace tiempo una serie de extraños fenómenos que causan terror a buena parte de los empleados. La mayor parte de esos acontecimientos han tenido lugar en la segunda planta, donde se han producido inexplicables fallos técnicos, como cuando todos los timbres de las habitaciones dejaron de funcionar a la vez, o cuando las emisoras de radio que usan los enfermeros en sus descansos se pararon de repente. Igualmente se han percibido extrañas presencias en la antigua cárcel o en la iglesia mudéjar que hoy día está en ruinas; ambas construcciones anexas al hospital. También se cuenta que en la primera planta hay un ala que permanece cerrada, pues en mitad de la noche se dejan oír pasos, golpes y voces, sin que nadie físico pueda producirlos.