Los extraterrestres crearon nuestro universo en un laboratorio
Nuestros supuestos creadores pueden haber desarrollado la tecnología necesaria para construir "universos bebés" capaces de producir vida
¿Hay en el universo un "proceso de selección darwiniana cósmica"?
La teoría de la evolución de Darwin postula que los organismos evolucionaron por selección natural. Este modelo puede aplicarse a un montón de disciplinas distintas como la economía, la sociología, la Inteligencia Artificial, la historia y hasta la cosmología.
Las investigaciones de la cosmología cuántica actual sugieren que las fluctuaciones cuánticas del cosmos pueden dar lugar a "universos hijos" o "bebé" de manera espontánea, y uno puede imaginar un "universo madre" que produce de ese modo una descendencia que evoluciona en base a la gravedad y la mecánica cuántica.
El problema es que nadie hasta ahora ha conseguido una teoría capaz de conciliar la Mecánica Cuántica y la Relatividad, dos de los pilares de la Física moderna.
Las teorías del físico Avi Loeb concilian la idea de un Creador con la física cuántica y la gravedad
Pero Avi Loeb imagina que «una civilización más avanzada que la nuestra podría haber logrado esa hazaña». En su opinión, además, esto permitiría combinar la noción religiosa de un Creador con la noción científica de la gravedad cuántica.
En otras palabras, un poder superior podría estar impulsando nuestro destino y el concepto secular de la gravedad cuántica. Esta teoría, claro está, depende principalmente de la capacidad de una hipotética civilización avanzada para fusionar los dos conceptos y su capacidad para identificar y recrear todos los ingredientes del universo.
Entonces, ¿fue nuestro universo creado en una placa de Petri? ¿Crearon los extraterrestres nuestro universo en un laboratorio?
"Si la propuesta hubiera nacido de cualquier otro –asegura José Manuel Nieves–, la cuestión no merecería más que un breve comentario, ya que no existe ningún modo de comprobar algo así. Pero Loeb no es un científico cualquiera".
En efecto, este científico dirigió hasta hace un par de años el Departamento de Astronomía de la Universidad de Harvard, es además director del Instituto de Teoría y Computación en el Centro Harvard-Smithsonian de Astrofísica y forma parte, entre otras cosas, del Consejo de Asesores de Ciencia y Tecnología del Presidente de los Estados Unidos. Casi nada.
El físico ha creado una nueva escala para medir el desarrollo tecnológico de las civilizaciones de las estrellas
"Dado que nuestro universo tiene una geometría plana con una energía neta cero, una civilización avanzada podría haber desarrollado una tecnología que creó un 'universo bebé' de la nada a través de un túnel cuántico", escribió Loeb en un artículo de opinión publicado por Scientific American el año pasado.
Huyendo de la escala Kardashev, que clasifica las civilizaciones extraterrestres en función del dominio de la energía de sus estrellas, Loeb ha ideado un marco que divide las civilizaciones avanzadas en clases en función de su capacidad para "reproducir las condiciones astrofísicas que llevaron a su existencia".
Los seres humanos estaríamos en la clase C porque, como civilización tecnológica de 'bajo nivel', no podríamos recrear nuestras condiciones actuales si el sol muriera repentinamente.
El trabajo termina termina con una llamada a la humildad. "Nosotros somos una civilización muy mediocre, y 'ahí fuera' debe de haberlas mucho más avanzadas. Lo único que tenemos que hacer es encontrarlas".
Comentarios (1)
Nos interesa tu opinión