Muere descuartizado el líder de una secta satánica

Cuando fue detenido, Fidel Andrés Palomino Alaus confesó que su intención era asesinar a 200 personas para limpiar la sociedad. Fito, como era conocido el líder de la secta satánica Uñas Negras, jamás llegó a culminar el total de crímenes que pretendía cometer en nombre del diablo, pero sí acabó con la vida de varios jóvenes de una forma terrible. El modus operandi era descuartizar a sus víctimas y después realizar con sus restos diferentes ritos.

En diciembre de 2011 encontraron el cuerpo de dos de sus víctimas. Los cádaveres habían sido divididos en más de diez partes. Uno de ellos no pudo ser identificado ya que no se encontraron la cabeza ni el tronco, pero sí estaba marcado con diferentes símbolos: una estrella azul en cada brazo, el rostro de un león y la letra M en el brazo derecho. También, debajo de estos símbolos las letras A. J. L. y diferentes signos orientales.

Fito fue capturado en 2012 y condenado a 25 años de prisión, condena que cumplía en la cárcel de Turi, en Cuenca (Ecuador). Esta ha sido una de las penitenciarias, junto a otras, que se han visto asoladas por los amotinamientos que han acabado con la vida de más de 70 personas y otras tantas heridas.

Durante los conflictos, Fidel Andrés Palomino Alaus fue asesinado del mismo modo en que él quitó la vida a sus vícitmas hace unos años: descuartizado. 

Hay quien ha querido ver en la secta satánica de la que se presentaba como líder tan solo una tapadera para apoderarse del control de la venta de droga, asesinando tan solo a quien suponía una amenaza para sus negocios con estupefacientes o les debía dinero.