El misterio de la moneda nazi que viajó desde el futuro
Una moneda nazi, acuñada presuntamente en 2039, vuelve a poner en solfa los viajes en el tiempo pero en este caso... Desde el futuro
The Man in the High Castle es una distopía basada en una novela de Philip K. Dick en la que nos propone una historia alternativa. Alemania habría conseguido desarrollar la bomba atómica antes que Estados Unidos y, por consiguiente, habría ganado la Segunda Guerra Mundial. La trama viaja entre mundos alternativos y viajes temporales.Casi como una prolongación de la serie que emite NETFLIX, hace unos meses, un mexicano llamado Diego Avilés encontró en unas obras una curiosa moneda nazi, con su esvástica grabada sujeta por el águila imperial en una de sus caras. En la misma figuran las palabras 'Nueva Alemania', en español y una fecha de supuesta acuñación: ¡2039! En el reverso de la moneda es visible la cruz de hierro y la frase "alle in einer nation", que se traduce como "todo en una nación" , un lema plausible para un país que ha logrado dominar el mundo.
En Chiapas, en el estado de La Concordia hay, en efecto, una Nueva Alemania, pero que se sepa, nadie paga monedas nazis. Entonces: ¿Es un fraude? ¿Demuestra los viajes en el tiempo o los universos paralelos? ¿Un futuro alternativo como el de The Man in the High Castle? En ese caso es para preocuparse.
A bote pronto, uno puede pensar que se ha alterado la superficie de la moneda para cambiar las dos primeras cifras, es decir, 1939 por 2039. Es lo más racional.
Pero, ¿y la frase? ¿Hace alusión a los inmigrantes procedentes de Alemania que llegaron en los años 20 a México para ingresar al floreciente negocio del café? Así es como nació el asentamiento Nueva Alemania de Chiapas. No parece probable. En cualquier caso, se descarta que se trate de una moneda conmemorativa. Si bien la nacionalización del petróleo mexicano en 1938 proporcionó una cooperación económica entre los dos países, cuando fue interrumpida al comienzo de la II Guerra Mundial, las diferencias políticas, minimizadas una y otra vez a lo largo de los años treinta, adquirirían un peso primordial y romperían relaciones.
La moneda hallada por Avilés no encaja tampoco con los marcos de curso legal durante la guerra, aunque guarda similitudes. Habrá que esperar al dictamen de la Universidad de México que llevará a cabo los análisis pertinentes para saber qué herramientas fueron utilizadas para “desgastar” la moneda y acuñarla, hasta entonces todo es especulación.
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