El entierro de los seis vampiros polacos

Llevamos unos años bastante repletos de descubrimientos de tumbas de vampiros. Porque ya hemos hablado en más de una ocasión de la vampira de Venecia, o del macro descubrimiento del cementerio de Gliwice de junio de 2013.

También semanas atrás el arqueólogo con nombre de cazavampiros Slawomir Gorka, había hallado en el pequeño pueblo de Kamien Pomorski, en Pomerania Occidental, la tumba de un cadáver con los dientes arrancados, con la pierna derecha atravesada con una estaca, y con un pedrusco metido en la boca al más puro estilo de la vampira veneciana. Bueno, pues ahora, en el cementerio de Drawsko, al noroeste de Polonia, se han descubierto seis tumbas muy especiales. Especiales porque los cuerpos allí enterrados, que se han encontrado en un sorprendente estado de conservación, fueron sepultados con una hoz rodeándoles la garganta.

El objetivo, según han determinado los arqueólogos que están llevando a cabo la excavación, es que si los cuerpos de los supuestos vampiros decidían salir de sus tumbas, ineludiblemente serían degollados por la hoz, por lo que volverían a morir en el acto.

Lo cuerpos hallados pertenecen a un hombre adulto, una adolescente, tres mujeres adultas y un joven de sexo desconocido, lo que viene a indicar que en los siglos XVII y XVIII, que es el tiempo en el que se supone fueron enterrados allí los vampiros, daba igual el sexo o la edad si de purificar el cadáver de un no muerto se trataba. Porque bastaba con tener una verruga mal colocada, una deformación física, o algún tipo de deficiencia mental para que cuando venían mal dadas rápidamente la mirada de los temerosos se fijase en los diferentes para acusarlos de sus males.Y era entonces cuando se cometían barbaridades como las que ya hemos comentado en alguna ocasión, o como la que refleja esta misma noticia.

"Ya hemos hablado en más de una ocasión de la vampira de Venecia, o del macro descubrimiento del cementerio de Gliwice de junio de 2013"

Lo que no es óbice para pensar que en determinados momentos, y ahí están los documentos para el que desee estudiarlos, se pudieron producir determinadas epidemias que la ciencia médica no fue capaz de explicar, como la ocurrida en Medvedja en 1732, por poner un ejemplo.

Volviendo al cementerio de Drawsko, varios científicos de la Universidad del Sur de Alabama ha declarado en la revista PLos One, que estos ritos no sólo revelan claves sobre los usos y costumbres de los habitantes de aquellas regiones en aquel tiempo, sino incluso hasta sus identidades. Para ello analizaron con isótopos de estroncio los cadáveres de los seis vampiros y de otros 54 individuos más, para lo cual se extrajeron un total de 60 molares, comparando los resultados con los mismos isótopos de animales de la región. Y el resultado fue que no se trataba de extranjeros, sino de gentes de la zona cuya muerte los pudo convertir en sospechosos.

Además los resultados de ambos estudios desvelaron que por entonces se produjo una epidemia de cólera que atacó con virulencia a la población.

Esta pudo ser la causa de las acusaciones que sufrieron los supuestos vampiros, como posibles precursores y difusores de la enfermedad, porque como apunta Lesley Gregoricka, responsable del estudios, "la gente de la época postmedieval no entendía cómo se propagaba la enfermedad, y en lugar de una explicación científica para estas epidemias, explicaban el cólera y las muertes que resultaban de ella de manera sobrenatural".