Satanistas contra la ley del aborto de Texas

Para plantar cara a las políticas conservadoras de George W. Bush, en 2013, nacía en Estados Unidos el Templo Satánico con el objetivo –según leemos en su web– de fomentar la benevolencia y la empatía entre todas las personas, rechazar la autoridad tiránica, defender el sentido común práctico, oponerse a la injusticia y emprender actividades nobles. Seis años más tarde fue reconocida como una organización religiosa y ahora ha anunciado su propósito de plantar cara judicialmente a la ley del aborto aprobada en Texas.

Y es que, aunque emplean iconografía satánica y suelen ataviarse en sus actos públicos con ropas negras, los fieles del Templo Satánico no adoran a Lucifer. Entre sus FAQs (preguntas frecuentes) podemos leer: "Quiero vender mi alma, hacerme rico, unirme a los Illuminati, etc…" La respuesta no puede ser más categórica: "Busque en otra parte".

Promueven la creencia en un Satanás personal

Estos nuevos satanistas aseguran no creer en la existencia de Satanás o lo sobrenatural.  "El Templo Satánico cree que la religión puede y debe divorciarse de la superstición. Como tal, promovemos la creencia en un Satanás personal". Y continúan: "Abrazar el nombre de Satanás es abrazar la investigación racional alejada de las supersticiones arcaicas basadas en la tradición".

En su nuevo perfil, más acorde a los tiempos que vivimos y, si me lo permiten, que mejor conecta con los jóvenes: "Los satanistas deben trabajar activamente para perfeccionar el pensamiento crítico […] Nuestras creencias deben ser maleables para la mejor comprensión científica actual del mundo material, nunca al revés".

Página de inicio de la web del Templo de Satán

¿La ciencia es Satanás? ¿La razón es Lucifer? ¿El pensamiento crítico es Belcebú?

Dicen utilizar la estrategia que sus "enemigos" y aseguran combatir con las mismas armas que la administración les concede. Así, cuando estaba a punto de erigirse en el Capitolio de Oklahoma una estatua que representaba las tablas de la ley confiadas a Moisés, los satanistas reclamaron una escultura del Bafomet de Eliphas Levi, para reclamar que, en los edificios públicos, deberían estar representadas todas las religiones. Y ganaron.

La nueva ley prohíbe el aborto cuando la mayor parte de las mujeres no saben aún que están embarazadas

Su nueva campaña se centra en la Ley del aborto aprobada recientemente en Texas que, no solo prohíbe la interrupción del embarazo a partir del primer latido del corazón del feto, sino que además invita a sus ciudadanos a denunciar a cualquier persona que haya colaborado en el proceso con suculentas recompensas económicas. 

Para impedir su puesta en práctica, los satanistas aseguran que el aborto forma parte de sus rituales y que, en consecuencia, debería bastar abrazar esta fe para sortear los impedimentos de la nueva ley.

"Animamos a cualquier miembro que resida en Texas y desee someterse al Ritual de Aborto Satánico dentro de las primeras 24 semanas de embarazo a que se comunique con El Templo Satánico para que podamos ayudarlo a luchar contra esta ley directamente" –reza su web. Y termina diciendo: "No seremos intimidados por una ley injusta o un gobierno estatal tiránico".

El nuevo paradigma legal de Texas es muy polémico, tanto que el propio presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha calificado lo aprobado de abiertamente inconstitucional.

Lo que Templo Satánico pretende ahora es que esas prácticas contravienen sus creencias y que, por lo tanto, coartan la libertad religiosa. En lo que vienen a ser una suerte de salmos de esta religión, sus creyentes recitan que "el cuerpo es inviolable y está sujeto únicamente a la voluntad propia" y, también, que "hay que tener mucho cuidado de no distorsionar los hechos científicos para que se ajusten a las creencias".