Oscura Navidad: La Befana
Descubre la historia de la bruja Befana que vuela en su escoba entregando dulces a los niños italianos
En medio del nacionalismo de la primera mitad del siglo XX, Italia buscó cambiar tradiciones que consideraba extranjeras por otras originarias. Su lucha los llevó a enfrentarse con el mito de los Reyes Magos que entregan juguetes a los niños la noche del 5 de enero. El motivo era que dicha creencia parecía originarse de una tradición pre-cristiana en donde se veneraba a una anciana a fin de año que se quemaba como símbolo del renacer. Esta es la historia de Befana:
Según el calendario alejandrino, el 5 de enero era la víspera del año nuevo, tiempo en que se creía que los espíritus aterraban a los hombres volando por los aires. En Italia, quienes aparecían en los cielos eran mujeres que ayudaba a las cosechas a veces bajo órdenes de la griega Hera y a veces bajo la romana Diana.
La palabra 'epifanía' se corrompió en 'befana' que en italiano significa 'bruja'
Cuando el cristianismo se asentó en los viejos territorios romanos, esta fecha pasó a ser la víspera de la epifanía; la primera manifestación humana de Jesús con la visita de los Reyes Magos. Así, las bellas mujeres que antes ayudaban a las cosechas, en la era medieval se convirtieron en una misma anciana decrepita que los cristianos aseguraban devota de Satán y por eso volaba en escoba lanzando maleficios. La palabra “epifanía” se corrompió para bautizarla como “befana” que lo mismo significa en italiano, “bruja”.
El mito asegura que Befana aún aparece en las zonas rurales de Italia. Cuentan que esa noche los animales pueden hablar y criticar a sus amos, por lo que los campesinos deben darles buenas raciones de comida para evitar sus quejas nocturnas. Pero el verdadero peligro es Befana; para alejar sus maleficios de los cultivos, hay que quemar su efigie en una hoguera y hacer ruido con cacerolas para ahuyentar los malos augurios. Si el humo se dirige al este, las cosechas serán buenas, pero si va al oeste, es mejor partir de ahí.
La misma leyenda se cuenta en Rusia con un personaje similar conocido como Babushka
Cuando el nacionalismo italiano se propuso a retomar la tradición, la lucha entre ambas creencias dio origen a una leyenda que pretendía fusionarlas. La misma leyenda se cuenta en Rusia con un personaje similar conocido como Babushka. Cuentan que cuando los Reyes Magos pasaron por ahí camino a Belén, una anciana les indicó el camino. Estos la invitaron a acompañarlos pero ella se negó. Al día siguiente, arrepentida, preparó un enorme canasto con dulces y regalos; pero por más que caminó, no pudo alcanzarlos. Así que mientras regresaba a casa, repartió los regalos entre los niños que había en su camino. Befana o Babushka, se convirtió en la vieja mujer nacionalista que regalaría dulces en vez de los Reyes Magos.
Befana hoy, se representa con la muñeca de una anciana bruja que comparte espacio con las decoraciones navideñas en Italia. Venecia celebra una regata en su nombre, Roma una carrera de 10km, Pisa una exhibición de clavados; todas competencias en donde los asistentes se disfrazan de Befana. Verona organiza una enorme hoguera donde se quema su efigie. Pero Urbania hace el mayor festival de todos en su honor, considerado incluso fiesta nacional. ¿La razón? Los italianos aseguran que la bruja existe, que se oculta de incógnito confundiéndose con la gente y que desde hace siglos vive en Urbania, esperando su encuentro con Jesús.
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