Texas podría convertirse en el primer estado en prohibir los chemtrails

Texas se convertirá en el primer estado en prohibir los chemtrails, las famosas estelas químicas de los aviones, si prospera la petición del grupo Clean Skies Texas, una organización sin fines de lucro, impulsada por mujeres preocupadas por el medio ambiente y los desafíos climáticos, así como por sus ramificaciones políticas.

Y, aunque la geoingeniería, es decir, la modificación artificial de los sistemas climáticos de la Tierra, es algo que se aplica desde los años setenta a través de la gestión de la radiación solar (SRM) y la eliminación de dióxido de carbono (CDR), más controvertida es la existencia de las estelas químicas, chemtrails o partículas en aerosol diseminadas por aviones en los cielos de todo el planeta.

Una encuesta internacional realizada en 2011 evidenciaba que el 17% de las personas preguntadas creían en la existencia de un Programa Atmosférico Secreto a Gran Escala. Paradójicamente, la creencia en esta geoingeniería encubierta ha ido en aumento en los últimos años vinculada a los problemas de salud derivados de la calidad del aire o el medio ambiente.

El 98% de los científicos no ha encontrado evidencias de geoingeniería encubierta

Imágenes difundidas por los creyentes en el fumigado químico

El número de seguidores de la teoría conspirativa es inversamente proporcional al de los científicos que les respaldan, según pone en evidencia una investigación publicada en Enviromental Reseach Letters, que concluye que el 98,7% de los científicos no había encontrado evidencia alguna de geoingeniería encubierta y que las estelas podían explicarse a través de otros factores, incluida la física y la química asociadas con las estelas de los aviones y los aerosoles atmosféricos. 

Aunque los famosos chemtrails son, en realidad, las estelas de condensación compuestas de partículas de hielo, que se hacen visibles detrás de los motores de los aviones a reacción, muchos siguen creyendo que rocían a la población con fines oscuros. Cómo si los que están detrás del pretendido “programa secreto” respiraran un aire distinto. Hasta prosperan en la red cómo distinguir los químicos de las nubes lineales de condensación de los aviones.

Contrails vs Chemtrails. Some still don’t believe their eyes. #Chemtrails #GeoEngineering #ClimateScam pic.twitter.com/4gERML3eqE

— Dev O. Lution (@TheRooster_) January 24, 2023

Por eso no es extraño que el grupo Clean Skies Texas esté recolectando firmas en una petición  que solicita a los representantes estatales que aprueben leyes que prohíban el rociado de aerosoles atmosféricos peligrosos sin la aprobación previa y las pruebas de los productos químicos que se rocían.

“Además de crear contaminación atmosférica en forma de cielos nublados y luz solar bloqueada”, Clean Skies Texas señala en su petición que las pruebas de “lluvia, agua subterránea y suelo indican que algunas de las sustancias o partículas que se rocían son óxidos de aluminio, bario y estroncio.”

Denuncian en su escrito que, en el verano de 2022, vecinos de Austin, Texas, observaron la fumigación de 10 a 25 bandas entrecruzadas que eventualmente formaron una capa de niebla tipo nube, en lo otrora había sido un día claro, y remiten a la web de geoengineeringwatch.org para más información. 

Dernuncian que la exposición de los seres vivos a las sustancias de los chemtrails genera problemas respiratorios 

chemtrails

Las mujeres que impulsan la petición añaden que “la exposición muy elevada de todos los seres vivos al óxido de aluminio y otros compuestos metálicos tóxicos, así como a otras sustancias o partículas en aerosol, está causando problemas respiratorios y otras condiciones negativas para la salud”.

La petición nace después de que dos geocientíficos James Marvin Herndon y Mark Whiteside publicaran un artículo en el Diario de investigación de avances en ciencias sociales, en agosto de 2022, acusando a las Naciones Unidas de participar en una conspiración para destruir el medio ambiente de la Tierra.

El gobierno federal de EE. UU. admitió tácitamente que la práctica continúa en la forma de Inyección de Aerosol Estratosférico (SAI, por sus siglas en inglés), que el exdirector de la CIA, John Brennan, señaló que es “un método para sembrar la estratosfera con partículas que pueden ayudar a reflejar el calor del sol de la misma manera como lo hacen las erupciones volcánicas”.

A 1 de febrero de 2023 ya habían firmado la petición 2158 personas. Sin comentarios.