Los oscuros orígenes del Proyecto MK-Ultra

Uno de los proyectos más controvertidos de la historiade la CIA es el MK-Ultra, que fue diseñado para determinar hasta qué punto es posible controlar y manipular la mente humana. Este proyecto permaneció en activo desde 1953 hasta 1971, casi dos décadas durante las cuales espías de EE UU llevaron a cabo cientos de experimentos clandestinos con ciudadanos estadounidenses, en los cuales se emplearon drogas para el control mental y la tortura psicológica. El contexto en el que se inició este proyecto nos traslada directamente a la Guerra Fría, especialmente a la década de 1950 y 1960. EE UU  una clara amenaza en los agentes soviéticos, chinos y norcoreanos, y temía que estos pudieran controlar y lavar el cerebro a los prisioneros de guerra estadounidenses en Corea. Precisamente, el mismo año que finalizó la guerra de Corea, en 1953, Allan Dulles, director de la CIA, aprobó el Proyecto  MK-Ultra a modo de contrataque: la intención era desarrollar técnicas contra el enemigo del bloque soviético, basadas en el control del comportamiento humano mediante manipuladores psicológicos, electroshocks y drogas.

Para los experimentos se utilizaron diferentes drogas con la intención de lavar el cerebro de las víctimas

A lo largo de este programa se realizaron más de 150 experimentos con humanos, muchos de los cuales no eran conscientes de que estaban participando en el estudio. Las pruebas se llevaron a cabo mayoritariamente en universidades, hospitales y prisiones de EE UU y Canadá. Sin embargo, se desconoce cuantas personas se vieron involucradas, ya que los registros no son nada detallados y muchos de ellos fueron destruidos cuando el programa se cerró oficialmente en 1973. 

Drogas como el LSD (dietilamida del ácido lisérgico), el MDMA éxtasis), la mescalina, la heroína, los barbitúricos, la metanfetamina y la psilobicina ("hongos mágicos") se utilizaron en este tipo de experimentos, todo bajo el control de Sidney Gottlieb, químico y experto en venenos de la CIA. Este  consideraba que, a partir de la alteración mental causada por la droga, se podía lavar el cerebro y realizar torturas psicológicas. Dentro del proyecto MK-Ultra destaca la Operación Clímax de Medianoche, en la que prostitutas contratadas por la CIA se encargaban de atraer a hombres a "casas" 
del servicio de inteligencia. Allí, mediante copas que escondían LSD, vigilaban el comportamiento de los sujetos drogados. Además, se instalaron dispositivos de grabación en las habitaciones de las prostitutas, aparentando ser enchufes eléctricos. La mayoría de estos experimentos tuvieron lugar en San Francisco, California y Nueva York.

El científico de la CIA, Frank Olson, murió en extrañas circunstancias al desplomarse desde la ventana de un hotel en Nueva York. Se especuló con que la propia CIA había sido la responsable de la muerte

MUERTES SIN ACLARAR

Las circunstancias de la muerte de Frank Olson, científico de la CIA, todavía no han sido convenientemente aclarada. Este científico bebió una de las copas en donde accidentalmente había LSD. Días después de este suceso, se desplomó desde la ventana de una habitación de hotel en Nueva York y su muerte fue considerada un suicidio. Sin embargo, la familia decidió hacer una segunda autopsia en 1994. El equipo forense encontró lesiones previas a la caída, por lo que se empezó a especular con que la CIA había sido la culpable de la muerte de Olson. Al final, tras una serie de procedimientos legales, la familia recibió 750.000 dólares del servicio de inteligencia y una disculpa del presidente Gerald Ford y del director de la CIA en ese momento, William Colby.

Frank Olson

Es posible encontrar una larga lista de voluntarios que se sumaron a estos experimentos del servicio secreto. El escritor Ken Kesey, autor de Alguien voló sobre el nido del cuco (1962), se ofreció a participar durante su etapa de estudiante en la Universidad de Stanford; también encontramos a Robert Hunter, letrista del grupo Grateful Dead; al terrorista Ted Kaczynski, conocido como el Unabomber; y a James Joseph "Whitey" Bulger, el famoso mafioso de Boston. Pero, ¿cómo salió este proyecto a la luz? Fue de la mano de Seymour Hersh, periodista del diario The New York Times, quien denunció públicamente en 1974 la existencia de una serie de experimentos no consensuados con drogas y operaciones de espionaje ilegal por parte de la CIA a ciudadanos estadounidenses. Este fue el comienzo de un largo proceso para sacar a la luz el Proyecto MK-Ultra, que había finalizado tan solo tres años antes.

¿Realmente la CIA dejó de lado este tipo de experimentos?

TODO AL DESCUBIERTO

En 1975, cuando el presidente Ford llegó al poder tras la dimisión de Nixon por el caso Watergate, estableció la Comisión de Actividades de la CIA para investigar las actividades ilegales de la Agencia. La comisión se denominó popularmente Comisión Rockefeller, porque estaba dirigida por Nelson Rockefeller. Tras una serie de investigaciones, se descubrieron documentos del MK-Ultra que llevaron a Ford a promulgar la Orden Ejecutiva sobre Actividades de Inteligencia (1976), mediante la que se prohibía terminantemente "la experimentación con drogas en seres humanos, excepto con el consentimiento informado, por escrito y presenciado por una parte desinteresada, de cada uno de esos sujetos". Pero ¿realmente la CIA dejó de lado este tipo de experimentos?

MENSAJEROS HIPNÓTICOS

El MK-Ultra no fue el primer proyecto relativo al control mental. El Dr. George Estabrooks, presidente del Departamento de Psicología de la Universidad de Colgate, contó cómo hipnotizó en 1942 a George Smith, capitán del Cuerpo del Servicio del Ejército, para que actuara como un mensajero hipnótico»: "El capitán Smith se había sometido a meses de entrenamiento, en los cuales se le había quitado, por sugestión post-hipnótica, todo recuerdo de haber sido hipnotizado. Primero hice que el Cuerpo de Servicio llamara al capitán a Washington y le dijera que necesitaban un informe del equipo mecánico de la División X, con sede en Tokio (…) Conscientemente, eso era todo lo que sabía, y fue la historia que le contó a su esposa y amigos". El doctor continuó relatando: "Luego lo sometí a una profunda hipnosis y le di un mensaje vital para que lo transmitiera directamente a su llegada a Japón al coronel Brown, de inteligencia militar (…) Le dije al capitán hipnotizado: 'Hasta que recibas nuevas órdenes mías, solo el coronel Brown y yo podemos hipnotizarte. Usaremos una frase indicativa: La luna está despejada. Siempre que escuches esta frase de Brown o de mí mismo,
pasarás instantáneamente a una profunda hipnosis'. Cuando el capitán Smith volvió a despertar, no tenía memoria consciente. Todo lo que sabía era que debía dirigirse a Tokio para recoger un informe de la división. Al llegar allí, Smith informó a Brown, y este lo hipnotizó de nuevo. Bajo hipnosis, Smith entregó mi mensaje y recibió uno para traer de vuelta. Despierto, recibió el informe de la división y regresó a casa en avión. Allí lo hipnoticé con la frase indicativa, y me dio la respuesta de Brown debidamente guardada en su mente inconsciente".