El atentado contra Trump estaba en la Agenda
El intento de asesinato de Trump ha propiciado las teorías de la conspiración y hay quienes aseguran que estaba planeado en la agenda global
El intento de asesinato del líder republicano Donald Trump en un mitin en Butler, Pensilvania, acontece en un clima de extrema polarización lo que, junto a la posesión de armas de fuego, convierte a Estados Unidos en una explosiva coctelera de violencia política.
Estados Unidos tiene una historia política marcada por la violencia. Hasta cuatro presidentes han sido asesinados y otros 16 han sido objeto de atentados, el último Ronald Reagan en 1981.
Con ésta, Trump ha burlado la muerte en dos ocasiones. En junio de 2016, Michael Sandford, un joven británico de 19 años, intentó apoderarse del arma reglamentaria de un policía durante un mitin en Las Vegas con la intención de matarle. Esto ha alimentado la idea entre votantes evangélicos y supremacistas blancos de que el expresidente es una suerte de Elegido.
Por eso no es extraño que -ahora- la paranoia se haya instalado en los votantes demócratas que hablan de un montaje u operación de falsa bandera para encumbrar a Trump en las encuestas.
Según The Economist, antes del atentado el apoyo al líder republicano rondaba el 65% pero tras el tiroteo elevan las opciones de salir elegido al 72%.
La palabra “montaje” fue tendencia en X (antes Twitter) en las horas posteriores al intento de magnicidio. Sin embargo sólo unos pocos milímetros libraron a Trump de la muerte, una distancia demasiado pequeña para pensar que se trata de una escenificación.
No faltan quienes, en la línea de la polarización política, hablan de un atentado ordenado por el mismísimo Joe Biden y el “deep state” (Estado Profundo). Entre los defensores de esta teoría se halla Elon Musk, quien a través de su red social ha cuestionado la labor del Servicio Secreto estadounidense. "Incompetencia extrema o fue deliberado" -escribe. "De cualquier manera, la dirección del SS debe dimitir."
Extreme incompetence or it was deliberate. Either way, the SS leadership must resign. https://t.co/0vYGrj6yuH
— Elon Musk (@elonmusk) July 14, 2024
Es verdad que hubo importantes fallos en el plan de seguridad que permitieron que un francotirador pudiera disparar a menos de 150 metros; que se hizo caso omiso de las personas que advirtieron a las autoridades sobre la presencia de un hombre armado en el tejado, pero de ahí a acusar a Biden de dar la orden hay un abismo.
No han faltado los seguidores de QAnon quienes difundieron que era “el precio a pagar [para Trump] por combatir a élites satánicas pedófilas”. En otros foros se lee que “el atentado contra Trump estaba en la agenda” e, incluso, aducen conexiones del tirador, Thomas Matthew Crooks, con empresas que denominan “globalistas”, como Blackrock.
🚨BREAKING: Ties discovered between Blackrock and Trump shooter Thomas Matthew Crooks, featured in their programming ⚠️
— Matt Wallace (@MattWallace888) July 14, 2024
HE ALLEGEDLY SHOT FROM “BUILDING 3”
THIS WAS ALL PLANNED‼️ pic.twitter.com/VW75ONF89P
Lo cierto es que el FBI no ha hecho pública ninguna imagen del tirador abatido por lo que no es posible confirmar si el joven que aparece en el vídeo difundido por la activista política de extrema derecha, Laura Lommer, y grabado en la escuela de secundaria del tirador es Crooks u otra persona.
El gigante inversionista ha difundido un comunicado en el que asegura que “el intento de asesinato del expresidente Trump es abominable. Estamos agradecidos de que el expresidente Trump no haya resultado gravemente herido y pensamos en todos los transeúntes inocentes y las víctimas de este horrible acto, especialmente en la persona que fue asesinada”.
No obstante, el comunicado no ha logrado disipar las acusaciones de los teóricos de la conspiración que creen que el intento de magnicidio estaba en la “agenda”.
Resulta llamativo, en este sentido, un juego de rol creado por Steve Jackson ¡en 1982! con el sugerente título de Illuminati: Un Nuevo Orden Mundial (INWO), que predice acontecimientos a través de sus naipes. Según sus seguidores, anticipó eventos como el colapso de las Torres Gemelas y el triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2016.
El objetivo es que cada jugador construya su red de poder, representada por cartas que añaden grupos a su zona de juego con los que buscan aumentar su influencia y trabajar hacia el dominio del mundo.
Lo curioso es que también vaticinó este atentado contra el expresidente. Atentos: "En cualquier momento y en cualquier lugar, nuestros francotiradores pueden derribarte" -se lee bajo la imagen esquemática de un Trump azulado. Para colmo, por razones que permanecen desconocidas, el Servicio Secreto intentó detener el lanzamiento de este juego premiado como Mejor Juego de Mesa de Ciencia Ficción en 1983 por su diana en el atentado contra el World Trade Center y el Pentágono.
¿Casualidad? Desde luego su nivel de acierto ronda el de la serie Los Simpson que también parecen amoldar como anillo al dedo situaciones de la serie a la vida real. ¿Cómo pudo anticipar Jackson tantos acontecimientos? ¿Será que hay un gobierno oculto que diseña los designios del planeta?
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