Recrean ECM's con realidad virtual

La Universidad de Santiago de Compostela (USC) ha iniciado un proyecto pionero que utiliza la realidad virtual para recrear experiencias cercanas a la muerte, con el objetivo de ayudar a pacientes con enfermedades terminales a reducir su ansiedad y miedo ante el final de la vida. Este innovador enfoque, liderado por el físico estadounidense David Glowacki desde el Centro Singular de Investigación en Tecnologías Inteligentes (CiTIUS) de la USC, busca ofrecer una perspectiva transformadora sobre la muerte y mejorar la calidad de vida de estos pacientes.

Proyecto NUMADELIC: una ventana a la trascendencia

Bajo el nombre de NUMADELIC (Experiencias para mejorar los resultados de salud mental en pacientes con enfermedades potencialmente mortales), esta iniciativa cuenta con una financiación de 900.000 euros proporcionados por la Tiny Blue Dot Foundation de Estados Unidos. El proyecto pretende recrear, mediante tecnología de realidad virtual, las sensaciones que experimentan las personas que han vivido situaciones cercanas a la muerte, como la percepción de caminar hacia una luz o la sensación de paz y aceptación. Estas experiencias suelen provocar en los individuos una disminución significativa de la ansiedad y la depresión relacionadas con la muerte.

Las ECM objeto de examen de la IA

David Glowacki, quien en 2006 sufrió una experiencia cercana a la muerte tras un accidente de senderismo, ha sido una figura clave en el desarrollo de este proyecto. Su vivencia personal le llevó a perder el miedo a la muerte y a explorar formas de replicar esta transformación en otros. Anteriormente, Glowacki había utilizado la realidad virtual para simular los efectos de las drogas psicodélicas con fines terapéuticos, demostrando que es posible inducir cambios significativos en la percepción y el estado mental de las personas sin necesidad de sustancias químicas.

Inteligencia artificial en el proceso de duelo

Paralelamente, la inteligencia artificial (IA) está emergiendo como una herramienta poderosa para acompañar a las personas en procesos de duelo. Una de las aplicaciones más destacadas es el desarrollo de chatbots empáticos que imitan el tono y estilo de comunicación de seres queridos fallecidos, permitiendo a los dolientes mantener conversaciones que les ayuden a procesar sus emociones. Estos asistentes virtuales pueden ofrecer apoyo emocional, recordar buenos momentos compartidos y proporcionar recursos útiles sobre el manejo del duelo.

Alexa

Un ejemplo notable es la aplicación Replika Pro, creada por la ingeniera de software Eugenia Kuyda en 2017. Utilizando conversaciones y datos de su amigo fallecido, Kuyda desarrolló un chatbot que replicaba la personalidad de este, ofreciendo a los usuarios una forma de interactuar con avatares que emulan a sus seres queridos perdidos. Si bien esta tecnología ha sido defendida como una herramienta terapéutica, también plantea interrogantes éticos sobre la privacidad y el proceso natural del duelo.

Amazon ha dado un paso másAmazon ha dado un paso másAmazon ha dado un paso más y trabaja en una tecnología que recupera la voz de personas fallecidas para que su asistente virtual pueda incluso conversar con nosotros.  

OpenAI ha realizado avances absolutamente espectaculares en los últimos años. Se trata de un servicio llamado December capaz de recrear informáticamente la personalidad de un fallecido. Volcaron los textos originales de una chica fallecida para "resucitarla" artificialmente. El algoritmo permitió conversaciones realistas con este avatar, transmitiendo la sensación de estar dialogando con una persona real al otro lado.

Harbisson Neil es oficialmente un cyborg

¿Hacia el transhumanismo?

La integración de tecnologías como la realidad virtual y la inteligencia artificial en aspectos tan íntimos de la experiencia humana, como la percepción de la muerte y el manejo del duelo, suscita debates sobre su relación con el transhumanismo. Este movimiento filosófico y científico busca trascender las limitaciones humanas mediante la tecnología, aspirando a mejorar nuestras capacidades físicas y cognitivas, e incluso alcanzar la inmortalidad.

Raymond Kurzweil, reconocido futurólogo tecnológico, ha pronosticado que la humanidad podría alcanzar una forma de inmortalidad en la próxima década, gracias a avances en inteligencia artificial, biotecnología y nanotecnología. Estos desarrollos podrían permitir superar los límites biológicos humanos a partir de 2030, incluyendo terapias genéticas y la integración hombre-máquina, como implantes neuronales y la interfaz directa con la IA.

Sin embargo, David Glowacki expresa cautela ante estas perspectivas. En una entrevista reciente al diario El País, afirmó: "La idea de vivir 500 años me asusta más que la muerte". Su enfoque se centra más en utilizar la tecnología para mejorar la calidad de vida y la salud mental de las personas, especialmente aquellas que enfrentan enfermedades terminales, en lugar de buscar una extensión indefinida de la vida.

La realidad virtual ayuda a enfermos y al duelo de familiares fallecidos

La convergencia de la realidad virtual y la inteligencia artificial en el ámbito de la salud mental y el manejo del duelo representa una evolución significativa en cómo la tecnología puede influir en nuestra comprensión y aceptación de la muerte. Mientras que proyectos como NUMADELIC ofrecen a los pacientes terminales una herramienta para enfrentar sus miedos y encontrar paz, las aplicaciones de IA en el duelo proporcionan apoyo emocional a quienes han perdido a un ser querido.

No obstante, es crucial abordar estos avances con una reflexión ética profunda, considerando las implicaciones de alterar procesos humanos naturales y las posibles consecuencias de depender de la tecnología para manejar aspectos tan esenciales de nuestra existencia. La pregunta de si estos desarrollos nos acercan al transhumanismo permanece abierta, invitándonos a debatir sobre el futuro de la humanidad en la intersección entre la tecnología y la esencia de lo que significa ser humano.