Ovnis y vida extraterrestre
21/03/2011 (13:05 CET)
Actualizado: 06/11/2014 (09:58 CET)
¿EXTRATERRESTRES EN ÁREA 51?
David BenitoLas actividades desarrolladas en las instalaciones militares más famosas del mundo, ubicadas en Nevada (EE UU), siempre han estado rodeadas de un halo de misterio. Proyectos clasificados, tecnología de ensueño, programas nucleares El siguiente reportaje –extracto del sobresaliente libro «Área 51» (Palmyra, 2011)– muestra las declaraciones de algunos ex trabajadores de dicha base que se refieren a la presencia de platillos volantes y extraterrestres en su interior.
El 15 de octubre de 1988 se emitió UFO Cover Up? Live, programa televisivo presentado por el actor Michael Farrel. El plato fuerte de la noche fue el testimonio de dos agentes del gobierno. Aparecieron con el rostro tapado y la voz electrónicamente modificada. Falcon y Condor –así se hicieron llamar– revelaron que el Ejército estadounidense tenía como «huéspedes» a varios extraterrestres y que existía un libro –conocido como Libro Amarillo–, escrito por uno de los alienígenas, en el que se daban detalles sobre su cultura y su estructura social. Aunque la revelación más sorprendente fue que estos seres de otros mundos tenían una base secreta en Área 51 bajo su absoluto control. Falcon dijo que los alienígenas siempre llevaban en la mano un objeto de cristal en forma octogonal, con el que podían mostrar imágenes de su planeta, perteneciente al grupo estelar Zeta Retículi, o de la Tierra tal como era hace miles de años. Por su parte, Condor habló de un acuerdo entre el gobierno americano y los extraterrestres, a grandes rasgos consistente en que las autoridades de EE UU no revelaban su existencia, y a cambio éstos no intervenían en nuestra sociedad y podían utilizar las instalaciones de Área 51.
Los agentes los describieron como criaturas de entre 1 y 1,25 metros de estatura, con ojos grandes, muy similares a los de un insecto, y con párpados internos. Tenían dos fisuras, una para la nariz y otra para la boca, y carecían de dientes. Sus órganos eran parecidos a los nuestros, pero mucho menos complejos, y su piel muy dura. En cuanto a su cociente intelectual, estaba por encima de 200. El sistema de audición superaba el de los perros, a pesar de tener unos pequeños orificios en vez de orejas. Su esperanza de vida oscilaba entre 350 y 400 años. En relación a su sistema de creencias, consideraban al universo una especie de «ser supremo». Poco después de la emisión del programa, se empezó a especular sobre la identidad de los dos agentes. El ufólogo Robert Hastings confirmó la identidad de Falcon, que en realidad era Richard Doty, un agente de la Oficina de la Fuerza Aérea de Investigaciones Especiales (AFOSI) asignado a la base de la Fuerza Aérea de Kirtland y retirado el 1 de octubre de 1988 (Continúa en AÑO/CERO 248).
Los agentes los describieron como criaturas de entre 1 y 1,25 metros de estatura, con ojos grandes, muy similares a los de un insecto, y con párpados internos. Tenían dos fisuras, una para la nariz y otra para la boca, y carecían de dientes. Sus órganos eran parecidos a los nuestros, pero mucho menos complejos, y su piel muy dura. En cuanto a su cociente intelectual, estaba por encima de 200. El sistema de audición superaba el de los perros, a pesar de tener unos pequeños orificios en vez de orejas. Su esperanza de vida oscilaba entre 350 y 400 años. En relación a su sistema de creencias, consideraban al universo una especie de «ser supremo». Poco después de la emisión del programa, se empezó a especular sobre la identidad de los dos agentes. El ufólogo Robert Hastings confirmó la identidad de Falcon, que en realidad era Richard Doty, un agente de la Oficina de la Fuerza Aérea de Investigaciones Especiales (AFOSI) asignado a la base de la Fuerza Aérea de Kirtland y retirado el 1 de octubre de 1988 (Continúa en AÑO/CERO 248).
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