La primera señal extraterrestre será puesta a prueba en 2017

Algo extraño sucedió la noche del 15 de agosto de 1977 en el Observatorio Big Ear de la Universidad Estatal de Ohio (EE.UU. Jerry Ehman estaba de guardia cuando algo le sobresaltó. Durante 72 largos segundos el investigador escuchó un mensaje de radio que parecía proceder de Chi Sagitarii, un grupo de estrellas situado a 220 años luz de la Tierra. Sin embargo, por más que el programa SETI dedicado a la búsqueda de vida extraterrestre en el espacio, jamás ha vuelto a repetirse.

La extraña frecuencia de radio no podía haber sido emitida desde la Tierra y su procedencia aún hoy se desconoce. Perplejo, Ehman marcó la señal con un círculo en un papel y escribió a su lado «Wow!». Era la primera vez que alguien se encontraba con lo que podía ser un saludo de una civilización alienígena... O no.

Ahora un profesor de Astronomía en el St Petersburg College de Florida, Antonio Paris, ha planteado una nueva teoría que podría explicar el origen de la famosa señal de radio «Wow!» 

La famosa señal no habría sido enviado por ninguna civilización inteligente del espacio exterior, sino que habría sido emitida por un fenómeno astronómico explicable. A juicio de Paris, se trata del resultado de la emisión de hidrógeno de dos cometas llamados 266P/Christensen y P/2008 Y2 (Gibbs) mientras transitaban por el cúmulo estelar M55 en la constelación de Sagitario. Alrededor de cada cometa activo hay una gran nube de hidrógeno con un radio de varios millones de kilómetros. Y Ehman detectó la señal en 1,42 GHz, que es la radiofrecuencia que emite naturalmente el hidrógeno.

Para probar su hipótesis habrá que esperar al 25 de enero de 2017. Ese día, el cometa 266P/C transitará de nuevo el área de la señal «Wow!»  y el 7 de enero de 2018 lo hará el P/2008 Y2. El objetivo del científico es dirigir un radiotelescopio hacia estos dos cometas, analizar sus espectros de hidrógeno y poner a prueba su hipótesis.

Como los radiotelescopios existentes están ocupados en esas fechas, El profesor ha iniciado una campaña de crowdfunding en internet para recaudar los 16.000 dólares necesarios para comprar e instalar un telescopio de radio de 3 metros que rastree y analice los espectros de estos dos cometas.